Es el lugar perfecto para hacer cómputo de las experiencias del Camino de Santiago, reflexionarlas, compartir las que creas oportunas y encontrar así la plataforma necesaria para tomar decisiones y fuerza para hacer cambios en tu vida. Según entras en el albergue puedes sentir una energía de amor y protección en cada rinconcito porque la intención con la que fue creado y que tienen hoy en día los responsables y hospitaleros que trabajan en él, confluye en crecimiento, comprensión, paz y armonía.
Lleva con sus puertas abiertas ya diez años, en los que han pasado miles de peregrinos, muchos de los cuales vuelven cada cierto tiempo e incluso los más atrevidos vuelven todos los años.
Precio exclusivo para peregrinos del Camino de Santiago acreditados.